Agradecer lo recibido
Saber dar las gracias por lo recibido es una virtud que debemos inculcar en nuestros hijos
Enseñarle a ser agradecido con lo que le regalan o le prestan
Desde que mi hija cumplió dos años se convirtió en una pequeña tirana "dame esto", "cómprame aquello", ¿dónde pusiste mis pinturas?... Mi esposo cree que es graciosa y trata de complacerla en todo. ¿Por qué no se da cuenta de que la estamos maleducando? ¿Qué pasó con esa gratitud que nosotros sentíamos hacia nuestros padres? El niño común de hoy cree que todo se lo merece y que tiene derecho de exigir lo que quiera.
¿Por qué es tan difícil que nuestros hijos aprendan a valorar las cosas? Nuestros hijos no tienen ni idea de lo afortunados que son al tener una casa agradable, unos padres que los quieren, una buena salud y una buena educación.
Recuerdo que mi hijo de cuatro años se sintió muy decepcionado por no haber recibido todo lo que él esperaba la última Navidad . Tenemos que reconocer que los adultos somos iguales.
Esperamos obtener todo lo que nos proponemos, tenemos muy poca tolerancia a cambiar nuestros planes y tendemos a pasar por alto los esfuerzos de cada día que recibimos en la familia. ¿Por qué no agradecer que la comida esté lista y que la ropa esté limpia y en su sito? ¿No es esta la misma actitud de nuestro hijo al recibir todo lo que esperaba?
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Aprender a dar las gracias
La gratitud es una virtud muy olvidada. Según los especialistas, si les damos a los niños todo lo que piden, les estamos enviando el mensaje de que si lo piden lo van a obtener siempre.
Mejor es no dar todo siempre. El niño que valora lo que tiene aprende a dar gracias, y finalmente a dar.
Los hábitos como dar las gracias y respetar los objetos, el espacio y el tiempo de los demás, poco a poco se irán llenando de sentido, de forma que el niño deje su egocentrismo para poder observar las necesidades de otros.
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